Una bicicleta de reparto, también llamada cargo bike o bici-carro, es una bicicleta diseñada específicamente para transportar carga, por lo que suele incluir una zona de carga montada sobre la bicicleta o, en el caso de los triciclos, entre las ruedas de la parte delantera o trasera. Las bicicletas de reparto son más resistentes de lo habitual, ya que el cuadro, frenos y transmisión deben soportar esfuerzos muy superiores a los de las bicicletas normales.
Características de las bicicletas de reparto
La bicicleta de reparto también se conoce como cargo bike o bici-carro, entre otros. Funciona mediante tracción humana y su diseño está contemplado especialmente para el transporte de carga. Se emplean principalmente para reparto de mercancías, para ventas ambulantes, servicios de mensajería, tráfico interno en grandes industrias, correo, reparto a domicilio en zonas urbanas, etc.
La bicicleta de reparto cuenta con una zona exclusiva para transportar carga que puede tener características específicas para cada necesidad. Entre las más comunes destacan las cestas, cajas cerradas y plataformas que pueden estar instaladas sobre la bicicleta o bien colocadas al frente, atrás o al lado de ella y sobre ruedas paralelas, de manera que ya no es una bicicleta sino un triciclo.
En la construcción de las bicicletas de reparto deben considerarse especialmente la transmisión, el cuadro, los frenos y la suspensión, ya que el vehículo va a destinarse para soportar mucho mayor peso que cualquier bicicleta convencional. Otros factores de vital importancia son la visibilidad que pueda tener el conductor y la maniobrabilidad, ya que no es lo mismo realizar maniobras en bicicletas convencionales que en una pesada bicicleta de carga.
Las bicicletas de reparto ofrecen diversas ventajas, como por ejemplo:
- Resultan económicas, ya que no consumen combustible.
- No contaminan.
- Pueden circular en zonas peatonales y generalmente tienen libre acceso a los carriles bici.
- Su construcción y mantenimiento son económicos y sencillos.
- Son ideales para recorridos cortos y no representan un grave problema de estacionamiento.
Entre las desventajas principales están:
- Requieren de gran esfuerzo muscular, principalmente en zonas con pendientes pronunciadas.
- Por lo general no ofrece protección contra las inclemencias del tiempo, excepto algunos modelos con cabina para el conductor y su mercancía.
- La carga que se puede transportar es limitada.
- No desarrollan una gran velocidad, por lo que no resultan adecuadas para largas distancias.
El uso de bicicletas de reparto tiene gran difusión sobre todo en países en vías de desarrollo, aunque poco a poco va ganando popularidad también en países desarrollados debido a las actuales tendencias ambientalistas.