Un HTPC (Home Theater PC), también llamado PC para cine en casa o media center PC (centro multimedia), es un ordenador diseñado específicamente para ver cine en casa (CD, DVD, Blu-ray) que puede utilizarse también como PC doméstico normal. Un HTPC sirve al mismo tiempo como ordenador para uso personal, como dispositivo multimedia y como videoconsola para jugar a videojuegos, por lo que es una alternativa ideal para aquellos que no quieran gastar mucho dinero adquiriendo cada componente por separado.
Características de los HTPC
Un HTPC o “PC para cine en casa”, es un ordenador con elementos de hardware y software especiales, diseñado pensando principalmente en ofrecer gran calidad de entretenimiento multimedia a sus usuarios.
Básicamente, un HTPC es un computador que puede emplearse como un reproductor multimedia para cine en casa, reemplazando al Blu-ray, y también puede dársele el uso común de un ordenador personal y de una videoconsola. Estos computadores vienen equipados con las conexiones comunes de un PC, además de conexiones multimedia más específicas, como HDMI, DVI o Displayport.
En los PC para cine en casa (HTPC) es esencial la conexión a Internet para llevar contenidos digitales multimedia al televisor, ya que permiten transmitir directamente al televisor streamings de audio y vídeo con sonido multicanal y en calidad Full HD. La tendencia es la interconexión multimedia y la TV por Internet, mediante la suscripción a servicios online de TV y vídeo bajo demanda.
Los HTPC pueden servir al mismo tiempo para varios usos: por una parte como ordenador para uso personal (navegador web, etc.), por otra parte como dispositivo multimedia (reproductor Blu-ray, grabadora de discos duros y disco duro multimedia), y por otra como videoconsola para disfrutar con videojuegos. Por ello, un HTPC es una alternativa ideal para los aficionados al cine doméstico que no quieran gastar mucho dinero adquiriendo cada componente por separado.
Además de los ordenadores, las consolas de videojuegos modernas como la Xbox o la PlayStation también pueden ser usadas como HTPC, gracias al reproductor de vídeo con el que vienen equipadas y a las conexiones multimedia que incluyen, además de la conexión a Internet.
Cualquier ordenador no puede ser usado como HTPC o considerado como tal, hay ciertas condiciones que un PC debe cumplir para recibir esa denominación:
- Unidades ópticas para reproducir CD, DVD y Blu-ray.
- Software que permita la reproducción de contenido multimedia en diferentes formatos, tanto de audio como de vídeo e imágenes, en alta definición y si es posible en 3D.
- Software para ejecutar videojuegos, generalmente emuladores de videoconsolas.
- Tarjeta de captura de televisión que permita recibir y grabar emisiones televisivas y radiofónicas.
- Interfaces digitales para poder trasmitir con alta calidad al televisor contenidos multimedia desde unidades de almacenamiento o desde Internet, como conexión HDMI, DVI o Displayport.
- Interfaces de red Ethernet y Wi-Fi que permitan descargar vídeos y música de Internet.
- Conexión de sonido multicanal 5.1 o 7.1.
- Hardware potente, con un procesador rápido, tarjeta gráfica capaz de reproducir contenido en 3D y disco duro con gran capacidad de almacenamiento.
- Silencioso.
- Portabilidad, diseño liviano y tamaño reducido, para para pasar desapercibidos y ser fáciles de transportar.
Normalmente los HTPC se construyen con componentes similares a los ordenadores personales, aunque suelen incluir hardware que no es comúnmente visto en los PC para añadir mayores funcionalidades al dispositivo, como por ejemplo tarjeta sintonizadora de TV o mando de control remoto para controlar cómodamente el HTPC desde el sofá sin necesidad de ratón o teclado. Dado que tienen que ser equipos pequeños, fáciles de transportar y muy silenciosos, suele tratarse de barebones o equipos con placas base mini-ITX o micro-ATX.
Uno de los principales beneficios de los HTPC es la reducción del espacio necesario, al evitar la adquisición de uno o más aparatos electrónicos. Otra ventaja es la reducción de costes, ya que resulta más económico comprar un ordenador con estas características que comprar un PC, un reproductor Blu-ray y una videoconsola de forma independiente. Otras ventajas comparado con un ordenador convencional son la portabilidad y la simplicidad de manejo.