Osborne 1

Lanzado en 1981, el Osborne 1 es considerado el primer ordenador portable. Incluía todos los componentes necesarios para ser un sistema informático completamente operativo: dos unidades de disquete integradas de 90KB de datos cada una, un teclado desmontable de tamaño completo con teclado numérico, un monitor CRT monocromo de 5 pulgadas y el sistema operativo CP/M, el más popular de la época. El paquete de software del Osborne 1 incluía procesador de textos, hoja de cálculo y otro software que por sí solo suponía casi el valor de la propia máquina.

Osborne 1

Características del Osborne 1

El Osborne 1, lanzado en 1981 por Osborne Computer Corporation, fue la primera computadora portable que fue un éxito comercial. Pesaba 10.7 kg, estaba basado en el sistema operativo CP/M y funcionaba alimentado directamente desde una toma de corriente, ya que no tenía batería. Se clasificó como un dispositivo portable, ya que podría ser embalado y transportado fácilmente a otro lugar, pero no disponía de batería.

La computadora se enviaba con un amplio paquete grande de software que suponía un coste casi equivalente al valor de la propia máquina, una práctica adoptada por otros fabricantes de computadoras basadas en CP/M en esa época. Puesto que el Osborne 1 fue un éxito de ventas, rápidamente aparecieron competidores tales como el Kaypro II.

El diseño del Osborne 1 se basó en gran medida en el Xerox NoteTaker, un prototipo desarrollado en Xerox PARC en 1976. Fue diseñado para ser portable, con un robusta caja de plástico ABS y un asa incorporada.

El Osborne 1 tenía CPU Z80 de 4 MHz, 64 kilobytes de memoria principal, puerto paralelo IEEE-488 y puerto serie RS-232. Sus principales deficiencias fueron una minúscula pantalla monocromo de 5 pulgadas (13 cm) de 52 caracteres y 24 líneas, un peso considerable y el uso de unidades de disquete de poca capacidad, que no podían contener datos suficientes para aplicaciones empresariales. Utilizó un controlador de disquete de baja densidad para mantener los costos bajos, de tal modo que los disquetes del Osborne 1 únicamente tenían una capacidad de 90 KB.

A pesar de sus carencias, tales como diseño poco atractivo, su peso, no disponer de un procesador demasiado rápido, tener poco espacio de almacenamiento en disco y no ser especialmente expansible, el Osborne 1 tuvo una muy buena acogida en el mercado, principalmente por su portabilidad, el software incluido y su precio, que le otorgaba una buena relación precio/rendimiento.

El Osborne 1 fue muy imitado y varios fabricantes de computadoras comenzaron a ofrecer computadoras portables baratas con el software incluido. La popularidad de Osborne fue superada por el Kaypro II, que tenía un monitor mucho más práctico de 9 pulgadas (23 cm) que podía mostrar 80×24 caracteres, así como disquetes de doble densidad que podrían almacenar el doble de datos. Osborne Computer Corporation no pudo responder eficazmente al desafío de Kaypro hasta después de que la ventana del mercado se hubiera cerrado y la época de las computadoras de 8 bits basadas en CP/M hubiera terminado.

En 1981, IBM lanzó la PC de IBM de 16 bits que era significativamente más potente y extensible que las computadoras de 8 bits de la época. Tras el lanzamiento en 1983 del Compaq Portable, compatible con IBM, el mercado de las computadoras basadas en CP/M se desplomó rápidamente y Osborne no pudo continuar en el mercado.

El efecto Osborne

El efecto Osborne es un término que se refiere a las consecuencias imprevistas de una empresa que anuncia un nuevo producto demasiado tiempo antes de su disponibilidad real, lo que termina teniendo un impacto negativo en las ventas del producto actual, ya que los clientes cancelan o aplazan pedidos para el producto actual, sabiendo que pronto quedará obsoleto.

El término fue acuñado después de que la compañía Osborne anunciara en 1982 el sucesor de la Osborne 1, el Osborne Executive y a principios de 1983 el Osborne Vixen aún más avanzado. Sin embargo, la compañía tardó más de un año en lanzarlos al mercado, de tal manera que el anuncio prematuro de la compañía provocó la caída de las ventas y finalmente su bancarrota en 1983.