Un kart eléctrico es un kart impulsado por uno o dos motores eléctricos alimentados por baterías recargables, que se recargan en una toma de red. Los karts eléctricos ofrecen unos márgenes de seguridad muy elevados, unos costes de operación reducidos, unas prestaciones similares a los karts con motor de combustión y son los únicos adecuados para los circuitos indoor, por lo que su uso está cada vez más extendido.
Características de los karts eléctricos
Un kart eléctrico es un kart de propulsión eléctrica. Se trata de vehículos motorizados de cuatro ruedas, sin suspensiones y por lo general monoplazas, impulsados por uno o dos motores eléctricos alimentados por baterías. Las dos ruedas delanteras se encargan del control de dirección, mientras que las dos traseras transmiten al suelo la potencia del motor.
La modalidad del automovilismo que se practica con karts sobre circuitos (kartódromos) se denomina karting. Los karts son ideales para la formación de pilotos y por lo general es el primer automóvil de cualquier aspirante a piloto de competición.
A diferencia de los karts convencionales, los karts eléctricos son impulsados por uno o dos motores eléctricos alimentados por baterías recargables.
Entre las ventajas de los karts eléctricos se encuentran las siguientes:
- La aceleración y el par motor de los karts eléctricos es generalmente mejor que en los modelos térmicos y la velocidad es suficiente para la mayoría de los circuitos de kart.
- Los karts eléctricos son vehículos de bajo mantenimiento, ya que después de cada carrera sólo requieren conectar las baterías al cargador y controlar la presión de los neumáticos.
- Puesto que se trata de vehículos todo-eléctricos (cero emisiones), están libres de contaminación y no emiten humos, por lo que las pistas de carreras pueden ser de interior en un ambiente controlado.
- Los karts eléctricos son muy silenciosos.
- Al no requerir depósito de combustible, se evitan todos los requisitos asociados a la seguridad contra incendios.
- Con los karts eléctricos se evita la instalación de aspiración de los gases de escape, indispensable en los kartódromos indoor con karts con motor de explosión.
- La energía eléctrica es mucho más barata que la gasolina.
- Los karts eléctricos tienen menos probabilidades de volcar que los karts de gasolina, debido a su peso mayor a causa de las baterías y a una mejor distribución del peso.
- Dado que emplean energía eléctrica, no tienen motores calientes ni un tanque lleno de gasolina, por lo que se evitan las quemaduras y son más seguros en caso de accidente.
Como principales desventajas de los karts eléctricos podemos citar las siguientes:
- La autonomía de las baterías es reducida, en torno a 20 minutos en función del tipo de baterías. Sin embargo, la carga se puede lograr en unos 30 minutos y es posible cambiar las baterías gastadas por otras cargadas. Las baterías de litio proporcionan mayor autonomía que las de plomo, pero son más costosas.
- El precio de las baterías es elevado, especialmente las de litio.
- Los motores eléctricos generan una gran cantidad de calor y necesitan ventilación.
A la hora de adquirir un kart eléctrico, tanto por seguridad como por facilitar la conducción, se recomienda que el vehículo disponga de carrocería integral, barra antivuelco, luz de freno, diferencial, marcha atrás, cinturón de seguridad de cuatro puntos y desactivación automática del acelerador al pisar el freno.
El kart eléctrico garantiza unos márgenes de seguridad muy elevados, unos costes de gestión reducidos y es el único adecuado para circuitos indoor, sin renunciar a las prestaciones de los karts con motor de combustión, por lo que la propulsión eléctrica es una alternativa muy válida al motor de explosión.