Sonido de los coches eléctricos

Los coches eléctricos que operan en modo todo eléctrico producen menos ruido que los vehículos tradicionales con motor de combustión, lo que puede hacer que sea más difícil para los peatones, los ciegos, los ciclistas y otros usuarios de las vías públicas ser conscientes de su presencia. Por ese motivo se consideró necesario dotar a los coches eléctricos de una serie de sonidos para alertar a los peatones de su presencia.

Sonido de los coches electricos

Sonido de los coches eléctricos

El sonido de los coches eléctricos está diseñado para alertar a los peatones de la presencia de vehículos de propulsión eléctrica que viajan a bajas velocidades. Varios países han promulgado leyes que regulan este tipo de dispositivos de advertencia, que por lo general establecen el uso obligatorio de sistemas acústicos de alerta para todos los vehículos eléctricos.

Los sonidos de advertencia de los coches eléctricos pueden ser activados manualmente por el propio conductor, como si se tratara de la bocina, o pueden activarse automáticamente a baja velocidad. Pueden ser de muy diversos tipos, desde sonidos claramente artificiales como pitidos o campanas, hasta los que imitan el sonido del motor o las ruedas que se mueven sobre el asfalto.

Algunas asociaciones de ciegos han expresado su preocupación por el riesgo que supone para las personas ciegas o deficientes visuales la reducción de ruido cuando los vehículos operan en modo todo eléctrico. A diferencia de los coches con motor de combustión, cuyo sonido supone una ayuda útil al cruzar las calles, los silenciosos vehículos eléctricos pueden representar un peligro inesperado, especialmente al dar marcha atrás o al estacionar a velocidades lentas.

La diferencia entre el nivel de ruido producido por el vehículo eléctrico en comparación con el vehículo de combustión es mayor cuando las velocidades son muy bajas, inferiores a 30 km/h, en las que el sonido de rozamiento del neumático es casi imperceptible. Este problema no sólo se da en los coches eléctricos a baterías, sino también en el caso de los híbridos cuando no hacen uso del motor de combustión.

Diversas investigaciones han demostrado que los coches eléctricos son tan silenciosos cuando operan en modo eléctrico que pueden suponer un riesgo para los ciegos, niños pequeños, ancianos, corredores, ciclistas y peatones, que sólo disponen de uno o dos segundos, dependiendo del contexto, para detectar de forma audible el lugar desde el que se acerca el vehículo. Se estima que los coches eléctricos tienen el doble de probabilidades de estar involucrados en un accidente peatonal que un vehículo convencional cuando el vehículo circula despacio, al aparcar o al realizar maniobras a baja velocidad.

Este problema no es exclusivo de los vehículos eléctricos, ya que también se produce con los vehículos ordinarios cuando existe ruido de fondo que genere un enmascaramiento auditivo, con lo que a menudo se detectan demasiado tarde para evitar accidentes.

Se considera que este problema se da a velocidades inferiores a 30 km/h, ya que a velocidades superiores los coches eléctricos y los vehículos convencionales son igualmente seguros, puesto que el ruido de rodadura de los neumáticos y el ruido del viento generan la mayor parte de las señales audibles a esas velocidades.

Todos los fabricantes de coches eléctricos han implementado soluciones para asegurarse de que los peatones puedan oirlos en entornos urbanos, utilizando sonidos creados mediante sintetizadores. Este sistema de alerta sonora emite un ruido similar al de un vehículo normal, utilizando frecuencias distintas para diferenciar el sonido del coche cuando acelera y cuando está detenido.

Por lo general, el sonido generado depende de diversos parámetros, tales como la velocidad de giro del motor eléctrico, la velocidad del vehículo o la carga, entre otros. Se recomienda evitar sonidos estridentes.

Aunque el dispositivo de alerta acústica sea obligatorio, usualmente el conductor podrá desactivarlo en ciertos casos, ya que habrá momentos en los que no es necesario que el coche emita ningún sonido, como los atascos.