Un microcoche eléctrico (en inglés NEV, Neighborhood Electric Vehicle) es un tipo de coche eléctrico a batería de pequeño tamaño, por lo que se encuadra legalmente dentro de la categoría de microcoche. En los últimos años los microcoches eléctricos a baterías han resurgido para uso ciudadano, debido a su facilidad de aparcamiento, bajo consumo y por el hecho de que en muchos países los microcoches tienen tratamiento legal y fiscal de motocicleta o ciclomotor.
Características de los microcoches eléctricos
Los microcoches eléctricos a baterías, en inglés Neighborhood Electric Vehicle (NEV), son vehículos eléctricos a baterías de pequeño tamaño, que tienen limitada la potencia, capacidad, peso y velocidad máxima. Por lo general son biplazas y suelen tener una autonomía de en torno a 50 km por carga.
Aunque existen diferentes definiciones de microcoche, en general suelen tener menos de 3 m de longitud, menos de 2.400 l de volumen interior, menos de 1.400 kg de peso y una velocidad máxima de entre 30 y 50 km/h, aunque estos requisitos dependen de las leyes de cada país. Normalmente los microcoches sólo disponen de dos plazas, por lo que únicamente tienen asientos para el conductor y un pasajero. Pueden tener tres o cuatro ruedas.
Además de los modelos urbanos orientados al transporte en la ciudad, existen otros tipos de microcoches eléctricos a baterías, como furgonetas, pick-up, camiones, vehículos todo-terreno o carritos de golf. Así mismo existen versiones específicas para uso de las fuerzas de seguridad, servicios públicos o uso militar.
En los últimos años los microcoches en general, y los microcoches eléctricos a baterías en particular, han experimentado un gran auge para uso urbano, especialmente en ciudades con mucho tráfico, debido a su facilidad de aparcamiento, bajo consumo y por el hecho de que en muchos países los microcoches tienen un tratamiento legal y fiscal a nivel de motocicleta, lo que conlleva menores impuestos, coste más reducido del seguro obligatorio y menores exigencias en lo que se refiere a la licencia de conducción. En muchos casos estos vehículos están catalogados como cuadriciclo o ciclomotor, y pueden ser conducidos como tales, sin permiso de conducir.
Puesto que los microcoches eléctricos a baterías son vehículos eléctricos a baterías, son impulsados únicamente mediante un motor eléctrico, obteniendo la energía de unas baterías recargables, que se recargan enchufando el coche a la red eléctrica. Por ello, son amigables y respetuosos con el medio ambiente, ya que no emiten gases contaminantes al medio ambiente como el CO2.
Por lo general los microcoches eléctricos a baterías deben estar equipados con cinturones de seguridad de tres puntos, pero en muchos países no suelen requerir limpiaparabrisas, luces delanteras, luces de freno, espejos retrovisores o intermitentes. En muchos casos, las puertas y los parachoques son opcionales, debido a la utilización de los cinturones de seguridad.
Algunos barrios, comunidades, urbanizaciones o complejos turísticos han sido diseñados específicamente con los microcoches eléctricos en mente, separarando las zonas habitadas de las zonas comerciales y de otro tipo, de tal manera que las zonas habitadas cuentan con rutas separadas de baja velocidad donde únicamente se permite el tráfico de microcoches eléctricos. En muchas comunidades residenciales está restringido el uso de vehículos con motor de combustión, y los residentes únicamente utilizan carritos de golf eléctricos para sus desplazamientos.