Tinta electrónica

La tinta electrónica, también llamada papel electrónico, es una tecnología de visualización que imita la apariencia de la tinta ordinaria sobre el papel. A diferencia de las pantallas convencionales retroiluminadas que emiten luz, las pantallas de tinta electrónica reflejan la luz como el papel, lo que las hace más cómodas de leer, proporciona un ángulo de visión más amplio que las pantallas emisoras de luz, ofrece mayor contraste y permite que se pueda leer bajo la luz solar directa.

Tinta electronica

Qué es la tinta electrónica

La tinta electrónica (en inglés “e-ink”), que también recibe el nombre de papel electrónico (en inglés “e-paper”), es una tecnología de visualización que imitan la apariencia de la tinta ordinaria sobre el papel. A diferencia de las pantallas convencionales retroiluminadas que emiten luz, las pantallas de papel electrónico reflejan la luz como el papel, lo que hace que sean más cómodas de leer, además de que proporcionan un ángulo de visión más amplio que la mayoría de las pantallas emisoras de luz. En las pantallas de tinta electrónica la relación de contraste se acerca a la de un periódico, por lo que se puede leer bajo la luz solar directa sin que la imagen se desvanezca.

La tinta electrónica es una tecnología que tuvo sus inicios en 2002 y ha venido evolucionando desde entonces. La tecnología de tinta electrónica mantiene el texto estático e imágenes indefinidamente sin consumo de electricidad. Son pantallas que permiten mostrar información, principalmente texto en blanco y negro, aunque ya existe el papel electrónico a color. Recientemente también se logró visualizar imágenes en movimiento a través de estas pantallas.

La tinta electrónica se caracteriza por ser una tecnología de pantalla con una visualización similar al papel, que ofrece un alto brillo y contraste, un amplio ángulo de visión y un consumo de energía extremadamente bajo. Actualmente está disponible comercialmente en escala de grises y en color.

En cuanto a sus usos y aplicaciones, la tecnología de la tinta electrónica tiene en los lectores de libros electrónicos su principal aplicación y es la que permite que un libro electrónico logre a través de estos aparatos una mayor semejanza a los libros convencionales, en lo que a visualización de texto se refiere. Se espera que el uso de esta tecnología se extienda también a periódicos y revistas de alta circulación.

Las aplicaciones de las pantallas de tinta electrónica no se limitan sólo a los conocidos lectores de libros electrónicos, ya que, aunque en menor medida, se utiliza también en otros dispositivos como etiquetas de precios electrónicas en tiendas minoristas, señalización digital, relojes en estaciones de autobuses, carteles electrónicos, teléfonos móviles y smartwatches, entre otros.

Por lo que se refiere a los beneficios de la tinta electrónica, se pueden destacar diversas ventajas con respecto a otras tecnologías similares. Uno de los principales atributos es su aporte a la ecología al reducir el uso de papel y que no requiere retroiluminación, lo que hace muy reducido su consumo de energía. Por otra parte, son pantallas más flexibles y delgadas que una pantalla de cristal líquido LCD. Además, las pantallas de tinta electrónica presentan resoluciones efectivas que superan claramente las de una pantalla LCD en densidad de pixels por pulgada (dpi). Respecto a la visualización, incluso en lugares con mucha luz es posible ver el texto o la imagen en pantalla desde cualquier ángulo, gracias a su elevado contraste.

En cuanto a las desventajas de la tinta electrónica, la principal desventaja y la razón por la que su uso no se ha extendido a otros aparatos, es que esta tecnología es mucho más costosa que la LCD, ya que una pantalla a color de esta tecnología puede costar varios miles de euros.

Otro problema que presenta es su baja tasa de actualización en comparación con otras tecnologías de pantalla de bajo consumo, como LCD. Esto impide la implementación de aplicaciones interactivas que utilicen menús de desplazamiento rápido o punteros de ratón que son comunes en los dispositivos móviles estándar. Por ejemplo, al ampliar un documento se produce una gran borrosidad durante la transición. También suponen un problema las “imágenes fantasma”, sombras o parpadeos que generan las imágenes cuando se actualiza la pantalla o cuando se carga una nueva imagen. Este “efecto fantasma” se resuelve cuando la pantalla se refresca varias veces.