Un terminal IP es un dispositivo electrónico que permite realizar una comunicación telefónica utilizando una red IP, ya sea mediante red de área local o a través de Internet. A diferencia de un teléfono convencional, un terminal IP utiliza una conexión de red de datos, en lugar de una conexión de red telefónica. Los terminales Wi-Fi permiten utilizar redes inalámbricas para conectarse al servidor de VoIP. Los teléfonos móviles con soporte Wi-Fi o conexión de banda ancha también permiten utilizar VoIP para realizar las llamadas.
Características de los terminales IP
Un terminal IP es un dispositivo diseñado para permitir la comunicación telefónica usando una red IP, ya sea que se utilice una red local o una con conexión a Internet. Estos terminales son generalmente usados para telefonía VoIP, una tecnología que permite la realización de llamadas de voz usando una conexión a una red en lugar de los servicios tradicionales de telefonía. En estos casos la voz es transportada en forma de paquetes de datos digitales, por lo que pasa por procesos de conversión a digital y reconversión a analógico durante una llamada.
Un terminal IP comúnmente es un dispositivo dedicado con una forma similar a la de un teléfono convencional, que se diferencia en que está conectado a una red de datos y no una red de telefonía. Además de tener las características propias de un teléfono convencional, un terminal IP también pueden contar con algunos extras, que le ofrecen más opciones al usuario y aventajan a un teléfono tradicional. En algunos casos estos terminales IP incorporan cámara de vídeo o permiten la conexión de una webcam, para que se puedan realizar videoconferencias. Al ser un sistema completamente digital y programable, suelen tener teclas especiales configurables mediante un sistema de administración que puede ser accedido por lo general mediante una interfaz web.
Un teléfono analógico también puede servir como teléfono IP, pero para ello se necesita un adaptador telefónico ATA (Analog Telephone Adapter, Adaptador de teléfono analógico). Los ATA son pequeños dispositivos que hacen posible el uso de un teléfono analógico como un teléfono IP. Con un adaptador ATA, el usuario puede conectar un dispositivo telefónico analógico estándar y éste opera, por lo general de forma transparente, en la red VoIP, ofreciendo las mismas ventajas de un terminal IP. Un ATA suele ser generalmente una pequeña caja con un adaptador de corriente, un puerto Ethernet y uno o más puertos telefónicos FXS y/o FXO.
También se pueden establecer conexiones VoIP utilizando un terminal IP por software. Un terminal IP puede ser una aplicación o software instalado en un sistema computerizado y que interactúa con el micrófono y auriculares/altavoz. Actualmente existen numerosos programas que funcionan como un terminal IP, estos programas usan el hardware de un ordenador o un teléfono móvil para realizar llamadas, además requieren de una conexión a Internet de banda ancha. El programa debe estar instalado en el dispositivo y puede ser usado desde cualquier lugar con acceso a Internet. El programa no requiere estar vinculado a un dispositivo específico, por lo que un usuario puede usar la misma cuenta para acceder desde un ordenador o desde un teléfono móvil. Los terminales IP software permiten reducir costes, además del ahorro de espacio que supone no tener un aparato más en la mesa.
Otra opción para utilizar la telefonía VoIP son los terminales Wi-Fi. Los terminales Wi-Fi, denominados también “teléfonos WLAN”, permiten utilizar redes inalámbricas para conectarse al servidor VoIP.
Otra variante son los teléfonos móviles con soporte Wi-Fi o con acceso a Internet de banda ancha, que también permiten utilizar VoIP para recibir y realizar las llamadas, sin requerir a la propia operadora de telefonía móvil en el caso de establecer la comunicación vía Wi-Fi. Las comunicaciones de voz sobre protocolo IP (VoIP) aplicada entre teléfonos móviles se denomina VoIP móvil. En este tipo de comunicación, la señal de voz que se transmite entre dos terminales móviles viaja a través de Internet empleando un protocolo IP.
La principal ventaja de la telefonía VoIP es que evita los elevados costes de la telefonía convencional, especialmente en llamadas de larga distancia, ya que las llamadas telefónicas entre suscriptores del mismo proveedor VoIP suelen ser gratuitas o mediante tarifa plana. Un teléfono o aplicación VoIP puede tener muchas funcionalidades que un teléfono analógico no admite, pero pueden presentar problemas de audio relacionados con la latencia. Por ello, la calidad de las llamadas VoIP es inferior a la telefónica, ya que los datos viajan en forma de paquetes, lo que puede suponer algunas pérdidas de información y demora en la transmisión.