Una conexión a Internet vía satélite, también llamado Internet satelital o simplemente Internet por satélite, es el acceso a Internet proporcionado a través de satélites de comunicaciones geoestacionarios. El servicio de Internet por satélite resulta un sistema de conexión recomendable en lugares donde no se dispone de cobertura de cable o telefonía móvil, tales como zonas rurales o aisladas, así como en áreas urbanas para evitar la saturación de las líneas convencionales o disponer de mayor ancho de banda.
Qué es Internet por satélite
El acceso a Internet por satélite consiste en el acceso a Internet a través de satélites de comunicaciones. El servicio de Internet por satélite se proporciona típicamente a los usuarios individuales a través de satélites geoestacionarios.
En cuanto a sus aplicaciones, el acceso de banda ancha a Internet por satélite está dirigido en gran medida a los residentes rurales como una alternativa al servicio de Internet a través de conexiones telefónicas clásicas o ADSL, así como en áreas urbanas con gran saturación de las líneas convencionales.
Los primeros satélites artificiales de telecomunicaciones comerciales estaban diseñados para retransmitir televisión, teléfono y datos de comunicaciones a alta velocidad. Las generaciones sucesivas de satélites de comunicaciones de alta potencia con mayores capacidades de rendimiento, ubicados a 35.786 kilómetros por encima de la superficie terrestre, se adoptaron para su uso en aplicaciones de televisión, aplicaciones militares y telecomunicaciones. Tras la invención de Internet, los satélites geoestacionarios de banda ancha atrajeron el interés como un medio potencial para proporcionar acceso a Internet. Estos nuevos satélites están diseñados específicamente y optimizados para aplicaciones de banda ancha.
Respecto a su funcionamiento, por lo general, el servicio de Internet por satélite se basa en tres componentes principales: un satélite, normalmente en órbita geoestacionaria, varias estaciones terrestres conocidas como gateways (pasarelas) que transmiten los datos desde y hacia el satélite a través de ondas de radio, y una antena parabólica en la ubicación del abonado, a menudo una antena VSAT (Very Small Aperture Terminal) con un transceptor. La antena VSAT debe tener una vista sin obstáculos del cielo para permitir la línea de visión adecuada al satélite.
Otros componentes de un sistema de Internet por satélite incluyen un módem en el extremo del usuario que enlaza la red del usuario con el transceptor y un NOC (Network Operations Center, Centro de operaciones de red) centralizado para supervisar todo el sistema. Trabajando en conjunto con un gateway de banda ancha, el satélite opera una topología de red en estrella donde todas las comunicaciones pasan a través del concentrador de la red, que está en el centro de la estrella. Con esta configuración, el número de antenas VSAT remotas que se pueden conectar al concentrador es prácticamente ilimitado.
El módem de satélite, también llamado módem satelital o “satmódem” (en inglés “satellite modem”) es un módem que se emplea para establecer una transmisión de datos con un satélite de comunicaciones. El término módem significa “modulador-desmodulador” (en inglés “modulator-demodulator”), y la función principal de un satmódem es transformar un flujo de bits de entrada en una señal de radio y viceversa.
El satmódem sirve como interfaz entre la antena exterior y el equipo del usuario (por ejemplo, un ordenador o un enrutador) y controla la transmisión y recepción de satélite. El satmódem recibe un flujo de datos de entrada desde el dispositivo de envío (ordenador, enrutador, etc.) y lo convierte o modula en ondas de radio, actuando a la inversa para transmisiones entrantes, lo que se denomina desmodulación. El módem de satélite dispone de dos tipos de conectividad: cable coaxial a la antena de satélite y cable Ethernet a la computadora.
Los módems satelitales suelen emplear la norma de telecomunicaciones DOCSIS (Data Over Cable Service Interface Specification) o WiMAX (World Interoperability for Microwave Access) para comunicarse con la pasarela asignada.
Además de los sistemas de recepción de Internet por satélite basados en antenas VSAT fijas, también están disponibles satmódem portátiles (cuya alineación no necesita ser tan exacta como las antenas VSAT fijas), así como teléfonos por satélite capaces de conectarse a Internet.
Las principales ventajas del satélite frente a las conexiones terrestres de banda ancha, es que tienen mucha más cobertura (por ejemplo, todo un país o incluso un continente) y que es más fácil reubicar un mismo equipo, con la misma suscripción, en otro emplazamiento.
Por lo que respecta a los inconvenientes, las comunicaciones por satélite se ven afectadas por la presencia de humedad y las diversas formas de precipitación (como la lluvia o la nieve) en el trayecto de la señal entre los usuarios finales o estaciones terrestres y el satélite. La señal es también susceptible de absorción y dispersión por la presencia de árboles y otra vegetación en la trayectoria de la señal. La cantidad de tiempo durante el cual se pierde el servicio se puede reducir aumentando el tamaño del reflector parabólico, de tal modo que se reciba mejor la señal del satélite en el enlace descendente y también para proporcionar una señal más fuerte en el enlace ascendente.
Además, para que el sistema funcione óptimamente es necesaria una línea de visión completamente limpia entre la antena y el satélite, sin ninguna interferencia, como una montaña u otro objeto en el trayecto. Puesto que el servicio de Internet por satélite bidireccional obliga tanto a enviar como a recibir datos de una antena remota de muy pequeña abertura (VSAT) al satélite, la antena parabólica en cada ubicación debe estar apuntada con precisión para evitar interferencias con otros satélites.