Las piscinas infinitas son piscinas que producen el efecto visual de que el agua se extiende hasta el horizonte o hasta el infinito. Resultan especialmente impresionantes si por su ubicación el borde parece fusionarse con una masa de agua más grande, tal como el océano. En las piscinas infinitas el agua se derrama por uno o más bordes del perímetro de la piscina, se recoge en un depósito de captación y se bombea de nuevo en la piscina.

Características de las piscinas infinitas
Las piscinas infinitas (infinity pool), también llamadas piscinas de borde infinito (infinity edge pool) o piscinas desbordantes, están diseñadas y construidas de tal manera que crean la ilusión óptica de que no terminan nunca, sino que la lámina de agua se pierde en el horizonte extendiéndose hasta el infinito.
Tipos de infinity pools
Podemos encontrar varios tipos de piscinas infinitas:
- Desborde infinity: en las piscinas infinitas con desborde infinity, el agua llega hasta el borde y se derrama sobre él de tal forma que el borde no resulta visible, pudiendo rebosar ya sea por un lado, varios o por todos. El borde por el que se derrama el agua está sólo unos cuantos milímetros bajo el nivel de la superficie del agua, por lo que resulta imperceptible. Un canal de captación recoge el agua que cae y la conduce a un depósito, para enviarla nuevamente al vaso de la piscina por medio de algún sistema de impulsión, de manera que la piscina siempre está completamente llena.
- Desborde mediante rejillas: en estos diseños el agua no rebasa el borde y cae verticalmente sobre la canaleta de captación, sino que desborda por todo el perímetro de la piscina sobre unas canaletas cubiertas por rejillas. Este sistema fue desarrollado para las piscinas de competición, para evitar oleajes.
- Desborde oculto: en los diseños con desbordante oculto el agua desaparece a través de una pequeña junta, de tal modo que desde el exterior no se distingue dónde se encuentra dicho desborde. En este caso las canalizaciones de agua y el depósito de captación también se encuentran ocultos, por lo general bajo el pavimento que rodea la piscina.
En las piscinas infinitas el efecto resulta todavía más impresionante cuando se crea la ilusión de que la piscina se funde con una masa de agua más grande, tal como un lago o el mar. Lo mismo ocurre cuando el borde infinito flota en el aire o parece fusionarse con el cielo, lo que es posible sobre todo cuando están construidas justamente al borde de algún acantilado, en las colinas o en lo alto de alguna edificación. Algunos diseños resultan verdaderamente impactantes, especialmente cuando desde la piscina se disfruta de una hermosa vista o puestas de sol espectaculares.
Las piscinas de borde infinito se ven a menudo en hoteles de lujo, centros turísticos exóticos, propiedades exclusivas y en los anuncios. En la actualidad, gracias a nuevas técnicas que han permitido desarrollar modelos más asequibles, se ha popularizado su uso, por lo que se pueden disfrutar también en viviendas particulares. El concepto de piscina infinita no es nuevo, ya que los primeros diseños surgieron en Francia a principios del siglo XVII, en el Palacio de Versalles.
El diseño y construcción de las piscinas infinitas es muy costoso debido a que se requieren minuciosos estudios estructurales, ya que casi siempre se construyen en lugares precarios, como acantilados, montañas o en la orilla del mar. El elevado coste de estas piscinas se debe a menudo a los complejos sistemas de cimentación que las anclan a las laderas.
También son necesarios complejos cálculos hidráulicos para dimensionar depósitos de compensación, canaletas de captación, tanques compensadores, diámetros de las cañerías, pérdidas de carga y otras especificaciones, para conseguir el efecto de lámina desbordante.
Además de las cuestiones técnicas referentes a ingeniería hidráulica y estructural, es primordial la labor de arquitectos y diseñadores paisajistas para que el resultado final sea inmejorable.