Masaje en silla

El masaje en silla es una técnica de masaje que se realiza en una silla de masajes, con el paciente sentado con las piernas flexionadas apoyadas en un soporte. Generalmente el masaje en silla es una actividad de corta duración, donde no se utiliza ningún producto y el paciente no necesita desvestirse, por lo no es necesario que se efectúen en privado.

Masaje en silla

Qué es el masaje en silla

El masaje en silla es una técnica de masaje de relajación que tiene muy corta duración, no se utiliza ningún producto y el paciente no necesita desvestirse ni acostarse. Simplemente se sienta en una silla ergonómica mientras su terapeuta realiza su trabajo aliviando el estrés.

El masaje en silla resulta tan práctico que puede ser aplicado incluso en el lugar de trabajo, sin requerimientos de grandes espacios o de privacidad, siendo el alivio inmediato.

Aunque existen muy variadas técnicas de masaje en silla, las más usuales son las derivadas del shiatsu donde para dispersar la tensión muscular se efectúan presiones digitales o palmares en puntos claves de acupuntura, además de compresión y estiramientos para desvanecer la tensión muscular.

El masaje en silla se enfoca principalmente en la cabeza, cuello, hombros, brazos, manos, espalda, cadera y cintura. Eventualmente también se puede dar masaje a las piernas.

El masaje en silla va de media a alta profundidad, por lo que al ejercer presión en determinados puntos puede ser que se experimente alguna molestia sobre todo en donde la tensión se acumula, pero desaparece en unos segundos. La tensión desaparecerá también rápidamente.

La recomendación que se hace es verificar que el terapeuta sea una persona profesional y cualificada.

El masaje en silla está contraindicado en personas con bajos niveles de glucosa en la sangre ya que puede haber riesgo de desmayo. Tampoco se recomienda en mujeres embarazadas ni en personas con padecimientos o lesiones en la piel, cardiopatías, alteraciones circulatorias, trombosis, embolias, insuficiencia hepática, reumatismo, padecimientos arteriales o estados febriles.

En la actualidad, el masaje en silla se ha convertido en el favorito de gran cantidad de personas que no disponen del tiempo suficiente para acudir a una consulta para recibir un masaje antiestrés.

Además se ha comprobado que resulta muy benéfico en el área de trabajo, mejorando la concentración, el pensamiento creativo y la energía de quien lo recibe dando como resultado una mayor productividad.