Actualmente, la seguridad en el ordenador es una cuestión de primordial importancia, dado que por una parte cada vez hacemos mayor uso y dependemos en mayor medida de los dispositivos computerizados, como ordenadores de sobremesa, portátiles, tablets o smartphones, y por otra parte se está produciendo un fuerte auge del software malicioso.
Malware y seguridad en el ordenador
En informática, al software o programa que daña nuestras computadora se le conoce como software peligroso, software malicioso o malware.
El malware no debe confundirse con un software con errores, ya que éste daña por accidente y no porque sea su finalidad en sí, a diferencia de lo que ocurre con el software malicioso, que tiene como principal objetivo dañar el equipo de forma premeditada.
La palabra malware proviene de la unión de las palabras inglesas malicious y software. Es muy común referirnos a cualquier programa que dañe nuestro equipo como virus, pero el término malware es mucho más indicado.
El malware está compuesto por diversas categorías de software malignos, como por ejemplo los rootkits, spyware, gusanos, troyanos, entre otros tipos de virus en general.
Las primeras apariciones de estos programas fueron en apariencia sin malicia, ya que fueron desarrollados como bromas o simplemente para tener algo que molestara al usuario. Un ejemplo muy común de este tipo de malware es aquel que consiste en una mosca que aparece en la pantalla. Cuando se inició el desarrollo de estos programas se desconocía el daño que podrían llegar a causar en la vida del usuario común.
Hoy en día, para mantenernos protegidos del malware son necesarios programas especializados, que en ocasiones no sólo se componen de un antivirus sino de una integración de varios programas, y de la ayuda adicional del usuario, que debe ser prudente al navegar en Internet.
El software de seguridad está diseñado para ayudar a prevenir la amenaza del malware, existiendo diversos tipos de software de seguridad:
- Antivirus: el antivirus es el tipo más conocido de software de seguridad, dado que detectan y eliminan virus.
- Cortafuegos o firewalls: su función es proteger nuestra red lo mejor posible, impidiendo ataques provenientes de Internet. Para ello, controla el flujo de datos entre el PC e Internet, rechaza los ataques del exterior y hace saltar las alarmas en caso de que algún software intente establecer conexión con Internet. Un atacante puede utilizar nuestra conexión para realizar actividades ilícitas en Internet, algo que a menudo sucede sin que el propio usuario sea consciente de ello.
- Paquetes de seguridad: un antivirus y un firewall suelen no ser suficientes para mantener nuestro ordenador a salvo del malware, por lo que existen paquetes de seguridad que ofrecen una protección más amplia para nuestro ordenador, dado que además protegen de troyanos, rootkits y keyloggers, e incluyen filtros antispam, software para filtrar contenidos, anti-spyware, software contra publicidad no deseada, control de sitios web anti-phising y análisis de dispositivos extraíbles, ya que hoy en día son un claro medio de transmisión de malware.
Si a pesar de todas estas medidas de seguridad, alguien accede a nuestra red, una contraseña robusta puede protegernos de males mayores, puesto que sólo conociéndola se puede modificar los ajustes del router.
Empleando software de seguridad, utilizando password fuertes y siendo prudentes en Internet, tendremos menos posibilidades de que un malware dañe nuestro equipo.