Errores y falsas alarmas en los localizadores de radares

Respecto a la eficacia de los localizadores de radar, aunque no son infalibles y existen numerosos factores que pueden provocar falsas alarmas, errores en la detección, que avisen tarde o que a veces no detecten, en general suelen ser fiables. Los principales factores que pueden provocar errores en los localizadores de radares son las imprecisiones o falta de cobertura en la localización GPS, errores o falta de actualización en la base de datos de radares fijos, instalación incorrecta del detector o interferencias.

Errores y falsas alarmas en los localizadores de radares

Errores y factores de error en los localizadores de radares

En lo que se refiere a la eficacia de los localizadores de radares, aunque existen numerosos factores que pueden provocar falsas alarmas, errores en la detección, que avisen tarde o que a veces no detecten, en general suelen ser fiables, aunque no sean infalibles ni mucho menos.

Errores en los localizadores de radares

Los principales errores que suelen ocurrir en los localizadores de radares son los siguientes:

  • Falsas alarmas, es decir, que adviertan de la presencia de un radar cuando no existe.
  • Que avisen tarde de la presencia del cinemómetro.
  • Que no detecten la presencia del cinemómetro.

Factores de error en los localizadores de radares

Veamos los principales factores que pueden provocar errores en los localizadores de radares, tanto en avisadores como en detectores de radar.

Factores de error en los avisadores:

  • Imprecisiones en la localización GPS, ya sea por falta de cobertura, zonas de sombra o interferencias.
  • Errores en la base de datos de radares fijos conocidos.
  • Falta de actualización de la base de datos de radares fijos conocidos.

Factores de error en los detectores:

  • Instalación incorrecta del detector, especialmente en lo referente a la situación y orientación de la antena, que provoca que las prestaciones del detector se vean mermadas.
  • Interferencias debido a otros dispositivos que operan en la misma zona del espectro electromagnético, como puertas automáticas, el detector de otro coche que circula cerca o la emisora de un camión o de un taxi.
  • Interferencias causadas por las lunas atérmicas, que reducen la fuerza de la señal captada por el detector y hacen que el detector tarde más tiempo en avisar. Se recomienda ubicar los detectores portátiles en la zona de puntitos negros justo detrás del espejo retrovisor que llevan la mayoría de las lunas atérmicas, ya que esta zona no tiene metal.
  • Interferencias causadas por el tráfico.
  • Distancia de detección reducida debido al modelo de detector, instalación y orientación de la antena, configuración, tipo de radar o tipo de detector.