Falsificación de monedas

La falsificación de moneda consiste en la creación de monedas y billetes, con el de fin hacerlos parecer como verdaderos, lo que constituye un delito que afecta la fe pública. Las monedas y billetes actuales se elaboran con técnicas complejas para evitar la falsificación, para lo cual incluyen características de seguridad muy difíciles de reproducir con técnicas normales.

Falsificacion de moneda

Qué es la falsificación de moneda

El acto delictivo de la falsificación de la moneda se ha realizado a lo largo de la historia empleando múltiples medios y métodos.

En la misma medida, en los países en los que se ha detectado falsificación de moneda se lucha contra este delito, por lo que las autoridades y las fuerzas de seguridad han ido implementando distintos instrumentos de detección y control haciendo más difícil la falsificación de moneda.

Historia de la falsificación de moneda

Si nos remitimos a las formas de pago de las antiguas civilizaciones, éstas tampoco estaban exentas de falsificaciones. En el caso de los antiguos mayas, que empleaban almendras de cacao como moneda de pago de sus actividades comerciales, se solían descubrir estas mismas almendras, pero rellenas de arena o lodo.

Inicialmente, el valor de la moneda estaba determinado por el valor del metal del que estaba hecha, y su legalidad le era dada por un cuño oficial que avalaba su valor.

Dado que las monedas eran unos discos de metal de forma aproximada, con un cuño oficial que avalaba su valor, para producir monedas falsas, los falsificadores recortaban las rebabas salientes de las monedas legales y con ellas se hacían monedas nuevas, que se consideraban falsificadas pero se fabricaban con el material auténtico.

Para evitar estas rústicas falsificaciones mediante el recorte de moneda se empezaron a acuñar monedas de canto elaborado con una matriz estándar.

Actualmente, tanto en América como en Europa es muy común el uso de monedas bimetálicas fabricadas con aleaciones de gran valor, por lo que en algunos países se falsifican acuñando monedas utilizando materiales de menor calidad que los acuñados oficiales. Inclusive se ha llegado al extremo, en el caso de monedas de alta denominación, que han provocado el retiro de circulación de cierto tipo de moneda porque había más unidades falsas que auténticas.

Respecto a los billetes, así como la falsificación de monedas es menos rentable porque el valor del metal constituye una parte apreciable de su valor, los billetes no dejan de ser simplemente papel impreso, motivo por el cual resulta más atractiva su falsificación. Existen múltiples máquinas para identificar monedas o billetes falsos.

Para evitar el fraude en los billetes, los bancos emisores de papel moneda los dotan de una serie de medidas de seguridad que dificulyan el fraude, entre las que podemos citar la utilización de papeles especiales con fibras, identificables con luz ultravioleta, marcas de agua, relieves o impresiones con coincidencias análogas en las dos caras.

Otra forma de falsificación es la producción de monedas y billetes por impresores legítimos que obedecen instrucciones fraudulentas, cuando los impresores oficiales de papel moneda fabrican billetes sin autorización no conocimiento de la autoridad monetaria.