El look casual de la barba de tres días es el pretexto ideal para no afeitarse a diario y evitar la odiosa irritación que ello implica. En esta época llevar la barba de tres días ya no se considera signo de abandono. No hay que temer al qué dirán, ya que este look es de lo más actual.
Qué es la barba de tres días
La barba de tres días es hoy por hoy un concepto refinado siempre y cuando se elija el estilo adecuado a la personalidad y fisonomía de cada quien. La barba de tres días es ideal para afinar la parte inferior del rostro y realzar los pómulos.
Se dice que fué Gainsbourg quien institucionalizó la hoy llamada barba de tres días, y que realmente oscila entre una semana y diez días.
La denominada barba de tres días da a quien la porta un aspecto relajado, casual y rebelde o de chico malo, pero exige cuidados diarios para dar esa impresión de estar recién salido de la cama sin aparentar falta de aseo.
Entre las celebridades internacionales que llevan este estilo, podemos mencionar a George Clooney, Pierce Brosnan, Patrick Dempsey o David Beckham.
Para ser el orgulloso portador de una ejemplar barba de tres días se recomienda dejar de afeitarse durante 48 horas. A continuación es necesario delimitar perfectamente la línea del cuello y los pómulos para no ofrecer un aspecto descuidado. Luego sólo queda cuidar el aseo, el crecimiento y la forma.
El mantenimiento en casa de la barba de tres días es muy simple con la ayuda de tijeras o afeitadora para obtener y conservar el largo deseado.
Un largo no mayor a 5 mm y el contorno desvanecido en un largo menor es lo recomendado para lograr una perfecta barba de tres días. Esto da un efecto natural y a la vez cuidado.
Si se tiene una barba muy tupida la afeitadora convencional puede no reconocer las zonas más o menos densas y crear algunos efectos no deseados. Por fortuna actualmente existen en el mercado máquinas especializadas y con accesorios adecuados para una perfecta barba de tres días.