Ante una situación de debilidad financiera, en forma de incapacidad para hacer frente a los pagos de diversas cuotas y la inminente solicitud de refinanciación de deudas, es muy importante antes de tomar la decisión de reunificación de créditos y préstamos en un único préstamo hipotecario, tener presentes todos los gastos implícitos que conlleva la operación.
Las operaciones de refinanciación de deudas implican numerosos gastos que deben ser valorados cuidadosamente con antelación a la formalización de la operación, ya que de lo contrario pueden contribuir a agravar la ya de por sí delicada situación financiera que atraviesa quien pretende este tipo de operaciones de unificación de créditos y préstamos en un único préstamo con garantía hipotecaria.
En la mayoría de los casos, los clientes o usuarios son ajenos a los gastos que pueden llevar aparejados una operación de éstas características, los cuales, en ocasiones, hacen que incluso no sea rentable su formalización.
En el caso de contratar o ampliar un préstamo hipotecario, los principales gastos a tener en cuenta en una refinanciación de deudas son los siguientes:
- La tasación de la vivienda que se va a hipotecar, por medio de empresas tasadoras oficiales, que emitirán un informe.
- Los gastos de cancelación del préstamo hipotecario anterior (se paga la comisión de cancelación más los gastos de gestoría y notario) y las comisiones de cancelación de los préstamos personales y resto de deudas.
- Los gastos de constitución de la nueva hipoteca (notario, impuestos, registro, etc.), que son los mismos que los gastos de una hipoteca normal. Hay que tener en cuenta además que en la constitución de estas hipotecas la comisión de apertura muchas veces supera el 1%.
- Honorarios del intermediario financiero. Hoy en día la forma más habitual de tramitar la agrupación de deudas es mediante una empresa financiera o profesional que asesora e intermedia en la operación, cobrando unos honorarios por esta gestión.
Dentro del amplio abanico de operaciones que se pueden llevar a cabo a la hora de refinanciar una deuda o reagrupar varias, cada una con su casuística particular, nos podemos encontrar con otro tipo de gastos específicos, asociados de manera más directa y adaptada a cada operación.
Como vemos, es muy importante informarse detalladamente, estudiar todas las opciones y dejarse asesorar por expertos, antes de tomar una decisión en firme acerca de cualquier operación de reunificación de deudas.