Los filtros fotográficos son filtros ópticos que se acoplan en la parte frontal del objetivo de las cámaras de fotos, cuya función es generar algún tipo de efecto en la fotografía, existiendo filtros protectores, filtros de colores, filtros de efectos, filtros de control de la luz, filtros IR y lentes de aproximación.
Qué son los filtros fotográficos
El filtro fotográfico es un accesorio destinado a acoplarse en la parte frontal de la cámara, en el objetivo, para lograr un efecto óptico determinado.
Usualmente, el filtro fotográfico se adapta al objetivo de la cámara a través de una montura de plástico o metal que cuenta con una rosca para el encastre del mismo al objetivo. Lógicamente, el diámetro del objetivo tiene que coincidir con el del filtro, a fin de que la adaptación sea posible.
Los filtros fotográficos están fundamentalmente fabricados de dos materiales:
- Cristal o vidrio: al ser un material más resistente y de mayor calidad, son más caros.
- Resinas plásticas, poliester, policarbonato, acetato, gelatina o gel: son más económicos y ofrecen una gran variedad.
Se pueden destacar varios tipos de filtros fotográficos y con distintas finalidades:
- Filtros protectores: no tienen influencia en el resultado final de la imagen y se usan para proteger la lente de golpes, rayones y suciedad. Los más conocidos son los Skykight.
- Filtros para blancos y negros: permiten diferenciar mediante su acción de grises, los distintos tonos de blancos y negros en la fotografía ByN. Los filtros para blancos y negros cumplen diversas funciones como: polarizadores (para quitar y reducir brillos y reflejos), de densidad neutra (reduciendo la cantidad de luz), de contraste (resaltando su propio color y oscureciendo otro complementario), y de efectos especiales, que como su nombre indica, ofrecen una cantidad ilimitada de efectos.
- Filtros de efectos: existen diversos tipos, como el degradado, que permite jugar con instrumentos de oscurecimiento o coloreado en determinadas zonas de la fotografía, y los filtros de estrellas, que permiten reproducir destellos de luz.
- Filtros de control de la luz: destacan los polarizadores, que seleccionan los rayos de luz que entran en la lente y generan colores más reales y saturados, y eliminan reflejos. Dentro de los filtros de control de luz también están los filtros ND, que ejercen un efecto de neutralidad en la entrada de luz en el objetivo, reduciendo los contrastes. Por su parte, los filtros correctores de color, reducen el impacto del color dominante en la fotografía estableciendo un equilibrio.